“La Historia nunca es un hecho aislado, es lo que nos hace entender nuestro presente”
Hoy, día del libro, hablamos con Carolina Molina, que ha presentado con gran éxito “Noches en Bib-Rambla” en la presente Feria del Libro de Granada. La escritora madrileña –aunque granadina de adopción– es autora de numerosas novelas ambientadas en nuestra ciudad como “La luna sobre la Sabika”, “Sueños del Albayzín”, “Iliberri, que te sea leve la tierra”, “El falsificador de la alcazaba”, “Guardianes de la Alhambra”, “El último romántico” y otras muchas, así como de cuentos históricos con temática granadina aparecidos en los libros “Cuentos engranados” o “Voces de la Historia en Granada”, entre otros muchos. Su amor por la novela histórica y por nuestra ciudad la llevó a ser hace unos años coordinadora de las Jornadas de Novela Histórica de Granada.
Carolina Molina
“Noches en Bib-Rambla” pertenece a la saga protagonizada por los Cid, una familia de defensores de los monumentos de Granada. Está ambientada en el siglo XIX, en que nuestra hermosa ciudad sufrió la destrucción de su patrimonio. Bajo excusa de la modernidad se echaron abajo palacios, iglesias, puertas árabes y casas moriscas. La novela apareció por primera vez en 2012 y, a pesar de haber sido un gran éxito de ventas y encontrarse agotada, no se había reeditado inexplicablemente hasta hoy, igual que ha sucedido con “Guardianes de la Alhambra”, en que Baker Street Ediciones se ha hecho con los derechos.
¿Qué ha supuesto para usted estar presente en esta feria del libro con “Noches en Bib-Rambla”, una novela tan demandada por sus lectores?
Ha supuesto una segunda oportunidad no siempre posible en el sector del libro. Una novela descatalogada tiene la muerte segura y que haya encontrado una reedición por parte de otra editorial tras catorce años es casi un milagro. Así que vuelvo a revivir lo que sucedió entonces.
“Noches en Bib-Rambla” pertenece a la saga protagonizada por los Cid, una familia de defensores de los monumentos de Granada
Bajo excusa de la modernidad se echaron abajo palacios, iglesias, puertas árabes y casas moriscas
¿Qué fue lo peor, a su juicio, de aquella destrucción del patrimonio granadino durante el siglo XIX, que usted ha tratado en la novela?
Lo peor es la sensación de comprender que a los gobernantes les importan más las piedras de un monumento convertido en cascotes que el propio monumento. Tanto la Puerta de Bib-Rambla o de las Orejas, cuyo desenlace cuento en la novela, como otros edificios emblemáticos de la ciudad, terminaron por convertirse en material reutilizable en obras urbanísticas, por ejemplo haciendo de peto en el embovedado del río Darro.
Con la demolición de tan variados monumentos, sin discriminación ninguna, llegamos a la conclusión de que no hemos cambiado prácticamente nada desde el s. XIX, al final lo importante es siempre el dinero, bien porque no se tiene para restaurarlos o porque se tiene y se desea emplear en construir casas de lujo en el lugar que ocupan.
Con la demolición de tan variados monumentos, llegamos a la conclusión de que no hemos cambiado prácticamente nada desde el s. XIX, al final lo importante es siempre el dinero
Es una firme defensora de la novela histórica, un género no siempre bien visto. Además de ser literatura, ¿cree usted en la capacidad de la novela o el cuento histórico para divulgar y enseñar?
La narrativa histórica es un género muy versátil por eso no entiendo esa leyenda negra que la define como un género menor. Una novela histórica bien escrita no deja de ser una novela como las demás, con su trama y personajes, pero además, precisamente por sus escenarios y descripciones, puede ser vehículo muy útil para enseñar la historia pasada y comprenderla en toda su magnitud. Porque en la novela puedes acercar la vida cotidiana, los sentimientos, el ambiente que existía en una época determinada, circunstancias que no se perciben en la lectura de un libro de texto. Además, ofrece algo fundamental tras la lectura, que es la de reflexionar y analizar lo que hemos leído. La Historia nunca es un hecho aislado, es lo que nos hace entender nuestro presente.
¿La veremos pronto presentando nuevos libros por Granada?
Espero nueva novela para el otoño y encauzados van dos ensayos divulgativos, un género que ahora me apetece abordar. A fin de cuentas, el ensayo no deja de ser para mí algo parecido a un reportaje periodístico, lo que me supone menos esfuerzo, a veces, que escribir una novela.
Actualmente es la directora de las Jornadas Madrileñas de Novela Histórica, muy exitosas –al menos siete ediciones–. ¿Tiene algún proyecto más en ese sentido?
Además de las próximas Jornadas Madrileñas para final de este año, es muy posible que pueda anunciar en breve una actividad que espero guste mucho a la ciudad de Granada. Pero para eso habrá que esperar un poco y solicitar la paciencia de los lectores y amantes del género histórico.
