Pilar Bensusan
De JxG
Me gustaría compartir con aquéllos que deseen leer estas líneas unos cuantos deseos de cara a este año electoral que nos toca vivir en este 2023.
Sobre las elecciones municipales del próximo 28 de mayo, pediría tener unos políticos sinceramente preocupados por transportar de una vez a Granada al siglo XXI en todos los ámbitos: desarrollo, economía, infraestructuras, trabajo, investigación, conservación y mantenimiento de la ciudad, cultura, educación -en donde, por cierto, salimos muy mal parados los granadinos, según un reciente estudio on line del que se han hecho eco los principales medios de comunicación del país-.
Pediría tener unos políticos con auténtico compromiso y responsabilidad para con la ciudad y los granadinos, que con decisión pongan los intereses de Granada por encima de cualquier otro interés. Unos políticos que vivan y sientan a Granada y su gente con la seriedad y preocupación que merece la situación tan dificultosa que atraviesa en muchos aspectos.
Unos políticos que vivan y sientan a Granada y su gente con la seriedad y preocupación que merece la situación tan dificultosa que atraviesa en muchos aspectos.
Unos políticos valientes, porque con valentía, que surge de la fuerza de la verdad, se derriban los obstáculos más imposibles. En fin, unos políticos que defiendan a Granada con verdadera dedicación y profesionalidad.
Sobre las elecciones generales de finales año, pediría primeramente que, tras ellas, se restablezca el orden constitucional e institucional que hemos mantenido desde 1978. Que se restablezca la división de poderes entre el Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial. Que se exija a todos el respeto a la Ley y al ordenamiento jurídico constitucional. Que desaparezcan los radicalismos y extremismos, emponzoñados y presentes con absoluta desfachatez incluso en un Gobierno que los permite, tolera y alienta. Que vuelva el espíritu de consenso y diálogo constructivo entre los dos partidos mayoritarios.
Que desaparezca la falsa confrontación entre “buenos” y “malos” creada artificialmente por alguno de los peores políticos que ha tenido este país, para servir a su necia ideología, heredada y rentabilizada directamente por su hijo pródigo, sus vasallos y sus socios.
De la política en general, pido que desaparezca la mentira, porque, los ciudadanos queremos políticos sinceros, inteligentes y capaces y no políticos que tratan a los españoles como tontos.
Sobre las elecciones generales de finales año, pediría primeramente que, tras ellas, se restablezca el orden constitucional e institucional que hemos mantenido desde 1978.
También pido que desaparezcan las campañas con falsas promesas que se olvidan al día siguiente de las elecciones. También porfío en que desaparezcan la incoherencia, el derroche, los chiringuitos y los delitos cometidos por esta clase tan nefastamente valorada por la ciudadanía, porque, aunque es cierto que pagan justos por pecadores, se lo han ganado a pulso.
Sé que la mayoría de éstos son deseos imposibles, y que no se nos van a conceder a los ciudadanos, pero algunos de ellos, seguro que sí que se harán realidad en este 2023 electoral…