Peterborough, en Cambridgeshire, celebra cada año, en enero, con ocasión del aniversario de su enterramiento en la catedral de la ciudad, un festival-certamen en memoria de la reina de inglaterra, katharine, que vivió en la alhambra. granada está permanentemente presente en su sepulcro, simbolizada por la exótica fruta que la recuerda.
Teodoro de Tiziano
Historiador
Katharine (Catalina de Aragón) fue enterrada en la catedral de Peterborough tras su muerte en el castillo de Kimbolton en 1536; fue la primera esposa de Enrique VIII e hija de los Reyes Católicos de España, Fernando e Isabel. Anteriormente había estado casada con el hermano mayor de Enrique, Arturo (cuando era príncipe de Gales), quien murió joven. Enrique, usó la boda con su hermano, después de haber estado casados durante más de 20 años con Catalina, como una excusa para divorciarse de ella. Declaró que su unión no era válida y se casó con Ana Bolena, comenzando la segregación de la iglesia en Inglaterra.
Distintos eventos
Un festival anual se lleva a cabo en la ciudad catedralicia de Peterborough en memoria de Catalina de Aragón a fines de enero, con servicios especiales, colocación de coronas y una misa católica romana, así como eventos de historia viva. El servicio conmemorativo generalmente se lleva a cabo en un día escolar para que los alumnos locales puedan participar, y durante el servicio, los alumnos y los dignatarios depositan flores, se cantan himnos y un recreador asume el papel de la Reina para leer su conmovedora última carta a Enrique VIII, su esposo.
Este año
En 2023, el festival se realizará del 27 al 29 de enero. Se organiza conjuntamente entre la Peterborough Cathedral y el Peterborough Museum. Se iniciará con el Servicio de Conmemoración el viernes 27 y una variedad de otros acontecimientos tales como caminatas y recorridos durante los siguientes días por el condado de Cambridgeshire, fiestas históricas, representaciones, mercados o recreaciones. Aún no se han anunciado todos los detalles de la celebración de este año, pero todos serán muy interesantes.
“Si te preguntas cuál es la fruta misteriosa que aparece en las fotos cerca de las flores, es una granada: Katharine la usó como uno de sus emblemas heráldicos”, dice la publicidad del acontecimiento anual, dirigida, claro está para los británicos y otros extranjeros no españoles, no granadinos. Durante algún tiempo, Katharine fue una de las dos reinas enterradas en Peterborough. La otra, Mary Queen of Scots, María Estuardo, fue enterrada también en la catedral de Peterborough, después de su ejecución en Fotheringhay, pero su hijo, Jacobo I, cuanto accedió al trono, la exhumó e hizo que la volvieran a enterrar en Westminster Abbey, por lo que “Ahora Katharine es la reina suprema en Peterborough”, señalan las guías del lugar.
¿Y en Granada?
La ciudad que Katharine (Catalina), sintió como propia, apenas la recuerda. Los habitantes de Granada en su mayoría no saben ni quién fue. Menos aún su importante contribución a la historia de Inglaterra, donde efectuó numerosas acciones que le han valido el cariño del pueblo inglés y que siga siendo considerada, a pesar de los avatares históricos, como una de las grandes reinas inglesas.
De esperar sería que nuestra ciudad, y que la Alhambra, donde habitó desde su llegada tras la reconquista y que abandonaría con 15 años para ir a desposarse con Arturo, algún día la rememoren. Envidia causa descubrir como el pueblo de Peterborough conmemora a su reina española. Quizá deberíamos extraer los réditos que nuestro encomiable pasado nos proporciona; Pero no, aquí, cuando se escribe este artículo, ciertos grupúsculos sumidos en el relativismo moral que conduce a la humanidad al abismo de la estupidez, piden, como los que desde el indigenismo tachan a Colón de genocida o tachan a Cortés de asesino, que se abola la celebración de la Toma.
¿Cómo ir al Festival?
Desde Granada es fácil llegar a Peterborough. Las fórmulas son varias. En avión hasta Londres, preferiblemente a los aeropuertos de Stansted o Lutton (Málaga ofrece numerosos vuelos) o a Mánchester, también desde Málaga, dado que los vuelos que Easyet ofrecía entre nuestra ciudad y Londres o Mánchester desaparecieron con la llegada de la pandemia. También hay otras posibilidades que no hay que descartar. Desde los aeropuertos a la localidad de Cambridgeshire en la que se celebra el acontecimiento, el desplazamiento puede efectuarse en automóvil, autobús o tren (deben consultarse estas posibilidades con detalle). El alojamiento en Peterborough es fácil. La ciudad tiene buenos y numerosos hoteles.
El evento principal del Festival, que se celebra en la Catedral, tiene un coste de 15 libras esterlinas, pero va acompañado de una copa de vino español. No está mal, pero ¿qué tal para otro año que se propiciara que el vino de España fuera oriundo de Granada? No estaría nada mal, significaría comenzar a vincular la celebración en memoria de Katharine con su añorada tierra…